Cuando tu madre y tu padre
Te he dado todo
Y has tomado todo el alimento
Ofrecido en el gran banquete
Sin interpretación
Incluyendo cada migaja rancia y mohosa
Dejado olvidado debajo de la mesa
Como alguien hambriento de salvación
tu vida comenzara
Ahora eres libre de ir a estar con Él.
En el desierto y en la montaña
Desnuda en tu paño de juncos
Comiendo langostas y miel silvestre.
Y cuando los bautices en su nombre
El fuego descenderá
Por ahora solo puede Fuente BE Fuente
Sin interpretación
Sin necesidad de rellenar los agujeros
De tu humanidad herida
Con la dulzura imaginada
De lo que nunca llegó

Cuando tomamos la encarnación, la Fuente de Vida pasa a nosotros a través de nuestros padres, y nosotros, completamente espirituales en nuestra naturaleza, entramos en la interfaz del tiempo y el espacio. Llegamos vestidos con nuestro cuerpo material y la personalidad que lo acompaña, llevando dentro de nosotros la manifestación de la Fuente-Espíritu como nuestra realidad más íntima.

En este entrenamiento cada uno ocuparemos nuestro lugar con nuestra Madre y Padre. VIDENTE ellos y recibirlos YA QUE SON.  Este movimiento es de autoempoderamiento y de liberación de la historia de culpa de los heridos que proyectamos sobre ellos. A través de esta culpa herida vivimos y permanecemos separados de la plenitud de nuestra naturaleza dentro de nuestra Alma-Espíritu. Con este VIDENTE, nosotros VER nuestros padres sean como son: Puertas del espíritu ofreciéndonos el Don de la Vida misma en el ropaje de la encarnación por la que cada uno de nosotros pasamos. 

Somos hijos de nuestros padres siempre, y también somos Hijos de la Fuente de Vida dentro de nuestra Alma-Espíritu, con la cual hemos tomado la decisión de encarnar. Al entrar en esta realidad, tenemos acceso a la Fuente y a la Vida, como Plenitud y Abundancia, sin proyectar las necesidades de víctima de nuestra culpa herida sobre la Fuente y el Espíritu. Aquí, irrevocablemente, la Fuente llega como Fuente, la puerta abierta que los recibe plenamente como ustedes, guiándolos hacia su Realidad Espiritual. 

Estamos empoderados para recibir la plenitud de nuestra Naturaleza en Espíritu, viviendo Su Cumplimiento y Su Abundancia y manifestando plenamente nuestra Vida a través del movimiento de nuestra Espíritu-Alma. Y tenemos el poder de aceptar plenamente con amor y gratitud: el Río Tierra de nuestros Ancestros y permanecer plenamente abrazados por aquellos que nos precedieron. 

Ron Young